Para realizar las tareas de reparación o simplemente de mantenimiento de nuestra bici debemos contar con herramientas adecuadas; estas podremos adquirirlas en un kit o maletín específico o bien podemos ir adquiriéndolas poco a poco a medida que nos surjan problemas y necesitemos nuevas herramientas. La diferencia está en si queremos o podemos hacer un desembolso grande al principio o ir haciéndolo de manera progresiva. En todo caso y siempre en la medida que podamos es conveniente comprar herramientas de contrastada calidad que aunque nos supongan un mayor gasto, también nos durarán más tiempo y no nos darán problemas. Una herramienta barata se deformará o romperá antes y puede incluso estropear piezas de nuestra bicicleta.
También un mal uso de estas puede provocar el mismo efecto. Los ajustes que debemos hacer casi siempre se harán con delicadeza. Las tuercas y tornillos deben estar simplemente apretados, si se aprietan en exceso se romperán. Si no se está seguro o si quiere ser más fino en el ajuste puede hacerse con una llave dinamométrica, que siempre aplicará el par justo de apriete; par que hemos de conocer, bien porque esté marcado en la pieza o bien porque nos hemos informado previamente. Siempre es importante guardar las instrucciones de la bici y de los elementos que instalemos en ella.
Aunque el número y tipo de herramientas que podríamos tener podría ser inmenso, ya que los componentes en las bicis van modificándose, renovándose o apareciendo por primera vez en el mercado y a menudo necesitan herramientas específicas; sin embargo intentaremos indicar las herramientas más comunes que usaremos con más frecuencia. Estas son:
